En 1615 Felipe III donó a esta iglesia la imagen del Cristo Yacente que había encargado hacer al escultor Gregorio Fernández con motivo del nacimiento del futuro rey Felipe IV en un Viernes Santo del año 1605.
Estaba entonces la Corte española, desde 1601 en Valladolid. Al ser trasladada la Corte a Madrid, fue trasladada también la imagen la Palacio Real y, desde allí, por expreso deseo del rey, a este convento.
Felipe III quiso que esta hermosa y venerada imagen no fuera solo para su devoción privada, sino que pudiera ser contemplada por todo el pueblo. 

Los vecinos de El Pardo, desde siempre, han tenido un gran afecto a este impresionante Cristo.
En dos ocasiones podemos decir que lo salvaron de la destrucción (en la guerra de la Independencia, cuando estuvieron las tropas francesas en este convento durante seis meses, y en la guerra Civil)
Por eso lo tienen como suyo, además de la devoción que le profesan. Desde 1947, la tarde del Viernes Santo, la imagen sale en procesión por las calles de El Pardo. Tradicionalmente la fiesta del Cristo se viene celebrando el 14 de septiembre.

Si deseas ampliar esta información, los Los Hermanos Capuchinos disponemos dos libros que muestran con detalle la historia de esta imagen. Puedes adquirirlos en el convento de El Pardo o a través de la página web que recoge todas nuestras publicaciones siguiendo estos enlaces:

El Cristo de El Pardo del Hno. José Martínez de la Torre

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Historia del Cristo de el Pardo del Hno. Gregorio Blanco García